¿EnLa pandemia del COVID-19, y la utilización de mascarillas asociada a esta, ha conllevado un innegable impacto mundial a nivel emocional y social, así como a nivel académico en el caso de niños y estudiantes.
Las mascarillas pueden tener un impacto potencial en el desarrollo del lenguaje y la comunicación en los niños pequeños. Las investigaciones han demostrado que estas no afectan significativamente la capacidad básica de procesamiento del lenguaje en niños de 4 a 8 años, ni en su rendimiento lingüístico general. Sin embargo, pueden tener un efecto significativo en la precisión del reconocimiento de emociones de los niños, ya que las caras enojadas enmascaradas se reconocen más fácilmente y las caras felices y tristes enmascaradas se reconocen con menos facilidad.
¡Pero hay más!
Las dificultades derivadas del uso de mascarillas no se limitan solo al lenguaje: Además de los posibles efectos en el desarrollo del lenguaje, el uso de mascarillas también puede tener impactos en otras áreas de la comunicación y la interacción social. Por ejemplo, las mascarillas pueden dificultar la percepción de expresiones faciales y señales no verbales, lo que puede afectar la capacidad de las personas para interpretar y responder adecuadamente a las emociones y los mensajes sociales. Asimismo, las mascarillas pueden dificultar la comunicación en entornos ruidosos, ya que reducen la claridad y la intensidad del habla. Estos efectos pueden ser especialmente relevantes para personas con dificultades auditivas, trastornos del espectro autista u otras condiciones que dependen de las señales visuales y auditivas para la comunicación efectiva.
Las mascarillas pueden también degradar la calidad de la señal del habla, lo que puede afectar la capacidad de los niños para aprender las formas fonológicas de nuevas palabras importantes para leer y escribir. El uso de máscaras puede conducir a una reducción en el volumen y la claridad del habla, lo que puede requerir que las personas hablen más alto o se repitan para que se les escuche con claridad. Para estos casos en los que la inteligibilidad del habla es crucial, se recomienda utilizar máscaras transparentes (aunque no se ha demostrado que haya eficacia en la prevención de la transmisión de la COVID-19) o estrategias de comunicación alternativas, como dispositivos de amplificación o comunicación escrita.
En resumen…
En definitiva, las máscaras faciales dificultan el acceso de los niños a las señales visuales, como los movimientos de los labios o la lengua, lo que puede inhibir su percepción y adquisición de los detalles finos del lenguaje.
Los posibles efectos a largo plazo de la interacción con mascarillas en el desarrollo del lenguaje aún no se comprenden por completo y se necesita más investigación para obtener una comprensión integral de estos efectos. Algunos efectos potenciales a largo plazo pueden incluir:
- Deterioro del desarrollo fonológico: las mascarillas pueden degradar la calidad de la señal del habla, lo que dificulta que los niños aprendan las formas fonológicas de nuevas palabras importantes para leer y escribir.
- Acceso reducido a señales visuales: las máscaras faciales ocultan el acceso de los niños a señales visuales como los movimientos de los labios o la lengua, que son importantes para percibir y adquirir los detalles finos del lenguaje.
- Interacciones sociales alteradas: las máscaras faciales pueden afectar la capacidad de los niños para identificar expresiones faciales y señales sociales sutiles, lo que podría afectar sus interacciones sociales y la comunicación con sus compañeros.
¿A qué se deben estos efectos?
Para comprender mejor estos efectos, se necesita más investigación en varias áreas:
- Estudios longitudinales: los estudios longitudinales pueden rastrear el desarrollo del lenguaje de los niños durante un período prolongado, comparando los resultados del lenguaje en niños que han experimentado una interacción con máscaras faciales con aquellos que no. Esto proporcionaría información sobre los posibles efectos a largo plazo.
- Estudios comparativos: los estudios comparativos pueden comparar el desarrollo del lenguaje y las habilidades de comunicación en niños de diferentes grupos de edad, con y sin interacción con máscara facial. Esto ayudaría a identificar cualquier diferencia relacionada con la edad en los efectos de las máscaras faciales en el desarrollo del lenguaje.
- Estudios de intervención: los estudios de intervención pueden explorar estrategias para mitigar los posibles efectos negativos de las mascarillas en el desarrollo del lenguaje. Por ejemplo, investigar la efectividad del uso de señales visuales alternativas o implementar intervenciones lingüísticas específicas para apoyar el aprendizaje de idiomas de los niños en entornos con máscaras faciales.
- Estudios transculturales: los estudios transculturales pueden examinar cómo los efectos de las máscaras faciales en el desarrollo del lenguaje pueden variar en diferentes contextos culturales y lingüísticos. Esto proporcionaría una comprensión más completa del impacto potencial de las máscaras faciales en el desarrollo del lenguaje.
En conclusión, se necesita más investigación para comprender completamente los posibles efectos a largo plazo de la interacción con máscaras faciales en el desarrollo del lenguaje en niños pequeños. Los estudios longitudinales, comparativos, de intervención y transculturales pueden contribuir a nuestro conocimiento en esta área e informar estrategias para apoyar el desarrollo del lenguaje de los niños en entornos con máscaras faciales.
Referencias
Carbon, C. C. (2020). Wearing face masks strongly confuses counterparts in reading emotions. Frontiers in Psychology, 11, 566886. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2020.566886
Frota, S., Esteve-Gibert, N., & Molnar, M. (2022). Editorial: Language development behind the mask. Frontiers in Psychology, 13, 835. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2023.1205215